Expats
Cualquier cambio es una situación de estrés, y un cambio de país, también lo es.
Por un lado se trata de una pérdida del país de origen, pudiendo llegar a convertirse en un duelo por lo que se deja atrás: familia, amigos, cultura, idioma, comida, estilo de vida, clima,…
Por otro lado nos tenemos que adaptar al país de acogida, y asimilar una cultura e idioma nuevo, empezar a conocer a personas nuevas y hacer amigos, a veces en otro idioma que no conocemos, con costumbres diferentes a las nuestras que pueden crear conflictos.
Con respecto al idioma pueden surgir muchas dudas, sobre todo en relación a los niños y un posible bilingüísmo. Si van a un colegio internacional, o a uno en el que se hable su lengua materna, o el idioma del país de acogida. Cómo afectará a cada niño, según las edades, y las características de cada familia, de las circunstancias, y cómo se ha llevado todo el proceso de cambio de país.
Te ayudamos en todos estos aspectos, incluso antes de mudarte, para analizar todos estos aspectos y preparar un plan teniendo en cuenta todos los factores implicados.